martes, 4 de febrero de 2020

Mini relato: Reflexiones nocturnas

Desde que tengo uso de razón me ha encantado la noche. El silencio, la brisa de la madrugada, el olor de los hornos haciendo el pan...
En el año 2000 vivía en una habitación del centro de Barcelona que tenía dos ventanales enormes de madera. Me fascinaba asomarme por ellas a altas horas de la noche. Veía las casas de los vecinos y como algunos de ellos miraban la televisión, otros dormían... Y yo allí a lo súper de Gran Hermano observando la cotidianidad del ser humano. 
He de decir que culpa de esta afición la tienen los cinco años que estudié en la universidad en horario de tardes. Una vez que llegaba a casa a las 22h no me quedaba otra que estudiar o hacer trabajos durante la noche. Así pues entre lección y ordenador mi hobby era espiar las calles y a los vecinos. Me compré un hámster para que me hiciera compañía. Sus hábitos nocturnos coincidían con los míos y me sentía comprendida. Fue una época de descubrimientos. Mezcla de independencia, libertad y sentimientos de pertenencia a un lugar/familia. 
Me hice fan de la Cadena Ser. Cada noche escuchaba el Carrusel deportivo, Hablar por Hablar y los fines de semana La nave del misterio. Qué nostalgia... 
Esta noche he vuelto a revivir parte de esas sensaciones nocturnas. Me han venido imágenes acompañadas de olores, emociones y de mariposas en el estómago. Cuando ésto ocurre me lleno de un buen-rollismo brutal y me ha apetecido un montón compartirlo. Y es que los momentos de felicidad hay que disfrutarlos al máximo. Carpe diem. 


3 comentarios:

  1. Me acabas de recordar mi época universitaria. Yo siempre he sido diurna, pero mi compañera de los dos primeros años era noctámbula, estudiaba de noche, se iba a la biblioteca y se ponía a escuchar Hablar por hablar. Luego me contaba los cotilleos y me hacía reír.
    La noche no me gusta, desde pequeña me asustaba y me sigue asustando. Cuando saco al perro parece que me persiguen por todos lados y voy corriendo al parque y vuelvo veloz. No me hallo.
    En quinto de carrera hice la prueba de estudiar de noche y triunfé como los chichos. Pero ya fue demasiado tarde, jajajajjaa.
    besotes y gracias por compartir tus recuerdos con nosotros.

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  2. Gracias preciosa! Me encanta leer tus comentarios. Muaks!!

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  3. Me he sentido muy identificado contigo en esas noches que no quiero o no puedo dormir y me pongo mi lista de spotify y dejo que el tiempo fluya. Gracias por compartir esta vivencia con nosotros.

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